5 Consejos sobre cómo actuar cuando hay problemas con tu Alberca

¿Notas que hay algo fuera de lo normal en las instalaciones de tu alberca y no sabes qué hacer? En ocasiones puede ocurrir que una parte del equipo de tu piscina sufra descomposturas por razones que no se pueden controlar. Quizá una pieza llegó al fin de su vida útil y ya no puede seguir funcionando o algún factor ambiental o error humano terminó dañando la maquinaria.

Sean cuales sean los motivos, es importante poder identificar cualquier problema que se presente para así solucionarlo de inmediato. A continuación te presentamos cinco sencillos consejos para que puedas diagnosticar y solucionar problemas.

1. Realizar un mantenimiento constante

El mantenimiento de rutina es una actividad de suma importancia para las instalaciones de tu alberca. No sólo te ayuda a mantenerla limpia y funcionando correctamente, sino que sirve para llevar un registro sobre cómo trabaja normalmente el equipo.

De esta forma, el día en que haya un problema, podrás identificarlo de inmediato porque tus propios registros y experiencia te indicarán que algo no marcha como de costumbre. Por estos motivos, conviene hacer un mantenimiento de rutina y llevar un registro diario del funcionamiento de la piscina.

2. Tener los manuales e instructivos a la mano

Los manuales del fabricante y los instructivos de operación del equipo de la alberca tienen información detallada sobre el funcionamiento y las partes que componen los sistemas relacionados con ella. Te recomendamos que conserves estos documentos y los tengas siempre a la mano porque son una guía útil para identificar y resolver problemas.

 

3. Buscar la fuente del problema

Una vez que has notado que algo anda mal con tu alberca, el siguiente paso será identificar qué es lo que está provocando aquello. El tipo de problema es indicativo de la causa: un agua turbia puede deberse a la presencia de contaminantes debido a un desequilibrio con la química del agua o a una descompostura de los filtros. Si el agua se enfría indica que algo anda mal con el calentador o si baja el nivel del agua puede ser por una fuga en el sistema de circulación.

Una vez que sepas cuál es la parte del equipo que está provocando el problema, podrás examinarla y hacer un diagnóstico.

4. Evaluar el tipo de problema

Existen desperfectos ocasionados por un error pequeño que se pueden solucionar con facilidad. Quizá sólo necesitas reemplazar el cartucho del filtro o hacer unos cuantos ajustes en el equipo.

Sin embargo, también hay problemas que requieren soluciones más complejas, como desmontar el equipo o sustituir piezas. Cuando se trata de algo más complicado y no cuentas con la preparación para llevarlo a cabo, lo mejor será siempre seguir el consejo que te daremos a continuación.

 

5. Consultar a un especialista

Algunos equipos de la alberca son maquinarias altamente especializadas que no pueden ser manejados por cualquiera. Es especialmente peligroso manipular aparatos que funcionan a base de gas o electricidad sin tener la experiencia adecuada. Un manejo imprudente de estos equipos puede llevar a accidentes graves. Por lo tanto, si identificas un problema que escapa de tus posibilidades, la mejor solución será siempre ir con un experto para que solucione todo de forma adecuada.

Esperamos que estos consejos te sean una guía útil sobre cómo actuar cuando hay un desperfecto en las instalaciones de la piscina. Recuerda siempre consultar a expertos que puedan proveerte de un mantenimiento apropiado.





Ahora que ya conoces los puntos más importantes a considerar antes de construir tu alberca, te recomendamos consultar a un grupo de expertos que te ayude a concretar tu deseo

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